V CARRERA SOLIDARIA PROYECTO HOMBRE

Si no tenía bastante con haber sufrido el día anterior en la Medrano Trail Race voy y me apunto a la V Carrera Solidaria Proyecto Hombre organizada en Logroño con una distancia de 7,5 km. Era una carrera que teníamos en mente Triki y yo, pero hasta que no supiésemos como nos encontraríamos después de la carrera tan dura del día anterior no nos apuntamos. Nos levantamos por la mañana y nos preguntamos, ¿qué tal están esas piernas?, pues bien dijimos, con un poco de agujetas, me pregunta Triki ¿nos apuntamos a la carrera? A lo que contesto pues venga (pero con la boca pequeña jajaja), pues nada coge el tío y se va a por los dorsales, ya no hay vuelta atrás.


Nos dirigimos hacia del barrio de La Cava donde estaba la salida y la meta del circuito y nos ponemos a calentar un poco.

Aunque salías de la ciudad enseguida te metías por un camino de tierra que va pegado a la autovía, el primer tramo no era conocido para nosotros ya que no habíamos pasado por allí antes, empiezan las primeras subidas no muy pronunciadas pero para mis piernas sí. A lo lejos se empieza a ver la cárcel y ya me voy situando porque por al lado hemos pasado bastantes veces entrenando, el recorrido empezaba a ser familiar.

Según llegas a la cárcel el recorrido empieza a picar para abajo por lo que aprieto un poco a lo que me dice Triki “no te enchules” y le contesto que no que lo que necesito es soltar pierna, las llevaba súper cargadas.

Seguimos con un ritmito bien, bueno yo sufriendo, hasta que llega otra subidita y ya tengo que bajar el ritmo porque el cuádriceps derecho parecía que se me iba a romper, ahí nos empieza a pasar gente pero a nosotros eso nos da igual, hasta que llegan dos chicas y nos gritan “Esas tortugas”.

Empieza la bajada y vamos hablando con las dos chicas que habían estado el día anterior en la Medrano Trail Race pero en la modalidad andarina y nos ponemos a hablar con ellas sobre la carrera y animándolas para que el año que vienen la hiciesen corriendo.

La verdad que no veía la hora de cruzar la línea de meta porque iba muerta, cuando nos quedaban 500 metros le digo a Triki que bajo ritmo porque ya no podían más mis piernas y como no podía ser de otra manera el siempre dándome ánimos. “venga que ya estamos ahí” y sí ya visualice el arco de llegada entrando en 45 minutos, muy satisfecha porque no podía dar más.

Un fin de semana muy intenso, de mucho sufrimiento pero muy contenta y siempre con el apoyo incondicional de mi marido Triki, gracias por tus ánimos y tus palabras.

GO TORTUGAS GO

Fdo. Mar