Duatlon La Robla

I Ducross de La Robla

El pasado sábado 26 de octubre se celebraba en la localidad leonesa de La Robla, el primer duatlón cross de dicha villa, correspondiente a la última prueba del circuito de duatlón.
Hasta allí se acercó la familia Arias, que venía de pasar el día en Asturias, y un servidor, David, que me acerqué en bici desde León, a transmitirle nuestro apoyo a nuestro compañero Isidoro, que peleaba por el liderato final en categoría de Veteranos A.

La carrera consistía en un circuito a pie de 3 Km, al que darían dos vueltas, un circuito a bici de 12 Km al que darían igualmente dos vueltas, y una última vuelta al circuito a pie, para completar los 6 Km de carrera, 24 de bici y 3 finales de carrera.
Nuestro compañero Isi, salió bien en la carrera a pie, y terminó el primer sector en tercer puesto de su categoría y 12 de la general para subirse a la bici.

El sector de bici, con una larga subida de unos dos Km sirvió para que se colocara en segundo lugar de su categoría, pero cuál fue nuestra sorpresa, cuando empiezan a llegar corredores a la segunda transición y nuestro querido compañero no llega y no llega. Nos ponemos en lo peor, y pensamos que quizás se haya caído o haya tenido algún incidente. Un buen rato después, a lo lejos, vemos aparecer a Isidoro, corriendo con la bici en la mano, el brazo ensangrentado, y la rueda trasera pinchada. Pero con el coraje, valor (y una pizca de cabreo, obvio por otra parte), tratando de llegar a la transición. Tras unos últimos 3 Km eternos, y con los ánimos de sus amigos, Isi llegaba a la meta desencajado y cabreado. Ahí nos contaría que yendo en segunda posición, había hecho los últimos 5 Km de la bici, con la rueda pinchada, corriendo con ella de la mano, solo para llegar a meta.
Para Isi fueron 6Km a pie + 19Km Btt + 5Km de transición + 3Km de carrera

Reflexión del autor:
A pesar de no guardar en buen recuerdo esta prueba, en la que podría haber ganado incluso la copa de duatlones, Isidoro mostró una valentía y arrojo encomiables. No se rindió ante la adversidad y cuando lo más fácil habría sido retirarse y tirar la bici por el barranco, tomó la decisión de llegar a meta, ya fuera en el puesto 30, 50 ó 150. Porque la esencia del deporte es y debe de seguir siendo esa, participar y luchar, principalmente contra uno mismo y en este caso particular, contra las adversidades.
Personalmente aplaudo muchísimo esta actitud y así intenté hacerselo saber.
Este sábado Isidoro me demostró mucho más como persona y deportista, que en cualquiera de las ocasiones que ha tenido la ocasión de subir al podio.
Isidoro, para mí estuviste de 10.
Bravo

por David.