Hay una carrera en el año en la cual lo que menos
importa es el tiempo que se hace o el ritmo que se ha llevado. Esta carrera es
la San Silvestre, ideal para realizarla acompañado de los amigos o la familia y
sobre todo por ir inculcando a los más pequeños lo hermoso, divertido y
beneficioso del deporte. Una carrera en la que se suele ir disfrazado e ir buscando
las carcajadas de los más pequeños.
Y por supuesto no hay mejor forma de despedir el año
que con una carrerita.
Esta vez iríamos a la carrera Cris, Deva, Millán,
Lucía (una sobrina) y un servidor.
La carrera discurre por un circuito urbano de 5 kms
saliendo del Parque de la Concordia y callejeando por los continuos sube y baja
de Guadalajara.
El día no podía ser más perfecto para correr, soleado
con 11° a las 12 de la mañana (hora en la que comenzaba la carrera), a
pesar de esto, no había demasiados corredores (unos 500…).
Salimos en cola de pelotón ya que íbamos con un carrito
de bebe y un patinete y según iban llegando los repechos comenzábamos a
adelantar corredores, aunque nuestro ritmo siempre fue de paseo y sobre todo
disfrutando con bromas y risas entre nosotros.
Y de esta forma llegamos a meta los 5 juntos.
A modo de curiosidad, según entramos en meta nos dijeron
que habíamos quedado terceros en la categoría de carritos de bebé, lástima que este
año no estuviera premiada.
Feliz Año a todo el
mundo y a seguir con nuevos retos el próximo año!!!!
GO TORTUGAS GO.......!!!
Diego.
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