CARRERA DEL CHAMPIÑON DE AUTOL (LA RIOJA)

Tras unos meses en el dique seco y casi sin tiempo para el running…. Tenía claro que había que ponerse las pilas y volver al lío, echaba de menos mis entrenos (sobretodo los del monte) y también las carreras….ese ambiente genial y divertido que todos los que alguna vez han tomado la línea de meta conocen! Justo una semana antes de la carrera ví el cartel y ya está, decidida a volver. La carrera era muy cortita, 8 km para los chicos y 4 km para las chicas, así que era la perfecta para la ocasión….jajaja.

Se disputa en Autol, un pueblo de La Rioja que está a solo 6 kilómetros del mío y que celebra las Jornadas De La Seta y El Champiñón, donde el pueblo se llena de expositores llenos de comida, verduras…y muy buen ambiente.

Sobre las 11 de la mañana llego allí, directa a recoger el dorsal y la bolsa del corredor. Como siempre todo un lujo para una carrera cuya inscripción cuesta sólo 2 euros…. Hasta camiseta nos dan! Si es que…estos de Autol  hacen todo a lo grande, como ya veremos más adelante...jaja

La salida está repleta de gente conocida, algo que te da subidón, aunque echo de menos a mis Tortugas y su buen rollo…eso sí que es un plus para cualquier reto!

Como siempre, me coloco en las últimas filas, dejando que la gente que va a “competir” y hacer tiempo realmente lo haga, pues yo solamente voy a disfrutar, como cada vez que salgo a correr. 

Comenzamos por las calles del pequeño pueblo y a los 200m ya se vislumbra el tono general de la carrera, pues después de una curva vemos una de las primeras cuestas. Otra a los 500m, y al llegar al primer kilómetro….zas!! La marea que iba delante de mí se encontraba subiendo una “peaso cuesta” de esas que te pone el corazón a mil y te ayuda a calentar si es que no lo has hecho todavía (como era mi caso….jajaja).

Después salimos a los caminos cercanos , y al poco vuelvo a ver otro reguero de gente que se acerca al tramo más duro y más chulo de esta corta carrera. Un ziz-zag hacia arriba de casi un km hasta llegar al cruce de Gatún (que es siempre un punto de referencia en los caminos de la zona) . Tras esta “subidita” ya nos disponemos a volver al pueblo y llegamos al mismo por más caminos rurales. La meta nos esperaba tras una recta rodeando el borde del río.

Aunque a priori la de hoy pudiera parecer aburrida, esta carrera me gustó. No sé si por los cambios en el recorrido, por toda la gente conocida que hay por todos lados o porque era corta….o simplemente por el  hecho de volver a enfundarme la ropa de carrera y las zapas , y verme de nuevo en la línea de salida (y de meta).

A buscar la próxima!!

Go Tortugas Go!!!!

Vero.