UA-51285685-1 Equipo leonés de Trail Running : TORTUGAS TRAIL LEÓN: III LE PETIT VILLALFEIDE

viernes, 16 de agosto de 2019

III LE PETIT VILLALFEIDE


Hablar del Trail Villalfeide no es sólo hablar de una carrera, es hablar del pico Polvoreda, una montaña mágica, que te atrapa como un imán. La senda que lleva a su cima, es el campo de entrenamiento en la que muchos locos del Trail, afinan sus piernas, para ir un poco más deprisa, para llegar un poco más alto.
En su décima edición el Trail Villalfeide se ha convertido en algo más que una carrera, ha alcanzado el nivel de imprescindible en el calendario de carreras de montaña y no sólo por la magia del lugar por donde discurren sus tres categorías (Trail, Le Petit y kilómetro vertical) sino también por su organización, el ambiente que la rodea y por la gente de Villalfeide, ver cómo un pueblo entero se vuelca para colaborar en la realización de un evento como este es, simplemente, increíble. Con todos estos ingredientes no se puede decir que no a correr una carrera como esta, pero en esta ocasión me inscribo en la categoría Le Petit. Hace algún tiempo que me di cuenta de que lo mío son estas carreras sin tanta carga de kilómetros ni de desnivel, pero en las que, desde el primer metro, sales al 100 % y en las que no reservas nada para el final. 

El sábado bien entrada la noche, Ana y yo nos presentamos en Villalfeide para pasar la noche, comprobando que no somos los únicos locos furgoneteros. Con las primeras horas del día se comienza a escuchar la llegada de los participantes de la categoría Trail, entre los cuales se encuentran nuestras tortugas Laura, Alfredo y Pablo. Ana y yo nos enfundamos con nuestra equipación tortuguil, bueno, ella con el polo de postureo y yo con la camiseta de Trail, je je je, desayuno y a la línea de salida para animarles, en unión de la tortuga Diego que acaba de llegar y que, al igual que yo, va a correr la Le Petit y de Belén, que se ha acercado para animarnos. Viéndoles salir la piel se te eriza y los nervios se meten en el estómago, deseando que llegue el momento de ser tu el que esté recorriendo los primeros metros de la carrera.
Toca mi calentamiento para soltar las piernas y apaciguar los nervios y a la línea de salida. La previsión meteorológica preveía lluvia pero por suerte en esta ocasión se equivoca y el día nos regala un tiempo inmejorable para correr. Cuenta atrás y a correr!!! Por delante nos esperan algo más de 11 kilómetros con 800 metros positivos. Desde el principio la carrera pica hacía arriba, trato de mantener un ritmo pero me doy cuenta que todavía no estoy recuperado de la carrera de Molinaseca, así que me pongo en modo “apretar los dientes” y para adelante. En el kilómetro 2 nos juntamos con los corredores del Trail y juntos afrontamos la primera parte del Polvoreda, por delante tenemos un muro de un kilómetro de distancia salvando 300 metros positivos. Empiezo la subida y trato de animar a los corredores del Trail a los que voy adelantando, aunque en el fondo lo que hago es animarme a mí mismo, la subida a cada metro se va haciendo un poquito más dura. Levantó la cabeza y veo a unos 100 metros a Laura y no puedo dejar de gritar: Vamos Laura!! Vamos Tortuga!!! A lo que ella responde con otro: Vamos Tortuga!!.
A falta de algo menos de medio kilómetro para llegar al punto en el que las dos pruebas se separan, la alcanzó y aunque ella me deja pasar decido seguir juntos. Queda poco para coronar, pero voy justo, hasta el punto de tener que parar durante unos instantes para recuperar el aliento. Me despido de Laura con otro vamos tortuga!!!, a ella todavía le queda otro “repechito” para coronar pero transmite muy buenas sensaciones. Casi un kilómetro de falso llano, en el que poco a poco me voy encontrado mejor, antes de la bajada técnica, en la que, en un par de ocasiones, me veo en el suelo y en las que me viene a la mente la imagen de Aitor en la Transvaldeónica…. Así que decido tomármelo con tranquilidad. Kilómetro 5 y la bajada se suaviza, cada vez me encuentro mejor y en esta zona disfruto corriendo e incluso adelanto a tres corredores que me habían pulido en la subida. Me vengo arriba y me digo a mi mismo, “que no te pase nadie, aprieta”. 
Comienzo la penúltima subida de la prueba y me encuentro realmente bien, me adelantan un par de corredores del Trail y decido seguirles el ritmo, lo consigo durante la subida, pero en el siguiente tramo de bajada los pierdo, cómo bajan….!!! Ya solo queda la última subida, un tramo de 600 metros con 150 metros positivos. Corono y veo al fondo el pueblo de Villalfeide, miro hacia atrás y no veo a nadie, ya solo queda algo más de un kilómetro para disfrutar. Ya en el pueblo me quito el chaleco de hidratación, la elástica tortuguil tiene que verse en todo su esplendor. Cruzo la meta, donde siempre esta esperándome con una sonrisa y con un beso mi mayor fan, la que siempre me acompaña en estas locuras: Ana. Juan Carlos, el  speaker me recibe con un: ”Aquí llega una Tortuga…” 

Me acerco al ordenador del cronometraje y me dicen que he llegado el duodécimo y me digo a mi mismo Olé!!! Buen resultado. Voy a la ducha y cuando vuelvo a la meta para esperar a las tortugas del Trail me encuentro con Rafa, un granadino que he conocido justo antes de la carrera y que, aprovechado sus vacaciones por el Reino, no ha podido resistirse a la llamada del Polvoreda. Comprueba mi nombre en la aplicación de la carrera y me dice que he quedado segundo en mi categoría!!!
Magnífica carrera, con un podio inesperado, que dedicó a Ana y a todas las tortugas, coronada con muchísimas risas y muy buenos momentos.
GO TORTUGAS GO!!
Santi.

No hay comentarios :

Publicar un comentario