Nos despertamos a las 8 de la mañana para dirigirnos a Luintra, punto de salida de la carrera. El dolor de cabeza y estómago revuelto se hacen latentes, pero a lo hecho pecho, ya sabemos que “noche de artista, mañana de payaso”. A la llegada a Luintra se percibe la gran organización del evento, Depa de speaker, hinchables, voluntarios, una bolsa del corredor digna de las grandes citas.
A falta de tortugas que hayan venido, me junto con los compañeros de Kalentadas Trail de Ponferrada y a las 10:00 da comienzo la prueba de 24k. El ambiente es inmejorable, el pueblo volcado con la carrera, la organización rayando la perfección y, por poner una pega, que el tiempo estuvo nublado y amenazante de lluvia durante buena parte de la prueba.
Si dividimos la prueba en 3 secciones, la primera discurría entre bosques de “carballos” precioso entorno, con bajadas por sendero vertiginosas y donde el olor a húmedo otoño, me hacían recordar los fabulosos hayedos de mi querido León. Me recordaba a zonas de Fontañán, Orzonaga, así como bajadas como las de el mítico Alto Sil. No en vano, la Ribeira Sacra está en los aledaños de ese mismo río Sil, pero algún ciento de kilómetros más cerca del mar. Esa primera zona es la más sufrida, por técnica, y nos encamina hacia las subidas más duras de la carrera.
Recibimos el avituallamiento del km 10,5 como agua de mayo, y comienza un segundo sector, más corrible, abierto, pero no por ello menos bonito donde la lluvia, yo que soy de secano pues mal, hace su aparición. Zona granítica que aprovecho para ganar posiciones. En la primera zona, al ser de senderos más estrechos, me tocó algún tapón. A pesar de que me empiezan a dar un poco de guerra los tendones de Aquiles, por la dureza del granito, sigo recuperando sensaciones. Visto y no visto, el avituallamiento del km 17 llega muy rápido y parece que la previsión de llegar a meta en 3 horas y media se puede cumplir.
Avituallamiento en el Parador, pensaba que lo había visto todo… pero llegar allí y ver el absoluto despliegue con: Zumo, vino, cerveza, jamón, chorizo, salchichón, queso, todo tipo de viandas amén de los típicos de una carrera normal, frutos secos, chocolate, barritas… de no haber sido porque iba mojado y algo frío, me quedo a vivir allí. El tercer sector comienza con una subida dura pero, sinceramente, bastante corrible, así que se pasa bastante rápido.
La bajada final hasta Luintra, donde se encuentra la meta se hace un poco pesada por el asfalto final, pero el recibimiento del público, Depa, los compis de Kalentadas que han entrado ya, merece la pena. Finalmente en la posición 40 de 300 (para haber corrido con resaca, no está mal) y el tiempo final 3:14 (como el número Pi π) así que súpersatisfecho.
Si a toda esta experiencia le añadimos una MEGACOMIDA para participantes y acompañantes con cortadores de jamón, cerveza para aburrir, paella para 500 personas, empanada, embutido, queso y un larguísimo etcétera de virtudes culinarias “da terra galega”, hace de esta carrera una de las fijas para futuras ediciones.
Carrera recomendable 100% desde Luintra, Orense, David para Tortugas Trail León.
OK
Go tortugas Go!!
Dave
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