Segundo año consecutivo que hago esta carrera en Medrano, un pequeño pueblo cerca de
Logroño.
Esta vez vienen a compartir el evento, Marcos y su chica Sonia, Marcos inscrito en la de 37 km
y Sonia la de 12 Km y un servidor en la media maratón, igual que el año pasado.
Aunque este año creo que estaba mejor físicamente que el año pasado, realmente lo he
pasado peor, me da la sensación que he sufrido más.
A las 08:45 horas me encuentro con Marcos y Sonia en la zona de salida de la carrera, Marcos
saldría a las 09:00 y los de 12 km y 21 km a las 09:30. Vemos salir a Marcos y ya estamos en
capilla para darlo todo por los montes de Moncalvillo.
Salida y a un trote alegre a por los kilómetros y cuestas que nos esperan con ansias de vernos
sufrir. Al poco de salir ya la primera subida que me deja sin aliento, la subida a la Cruz del
Muerto, el año pasado era subir y bajar prácticamente por el mismo sitio, este año se sube
igual pero baja por otro sitio más bonito pero más jodido de bajar.
Llego al primer avituallamiento en el km 6 bastante entero y con buenas sensaciones, después
de reponer algo de energía toca subir por medio del bosque y allí me gritan un VAMOS
TORTUGA que realmente me sorprende, en mitad del bosque , era Marcos que
desgraciadamente se notaba la pierna algo cascada y sumando que se había perdido en el
recorrido llegó a la conclusión de que era mejor parar y así evitar que fuera a peor, no
obstante esperó a Sonia e hizo la de 12 con ella, todo un caballero.
Bueno pues yo a lo mío sigo subiendo por el monte, sin camino, escalando entre arboles, barro
y un largo etc, el caso es que es bonito el sitio pero ya voy notando que se me va a hacer duro.
Un pequeño descenso muy rápido por un sendero precioso y ya desde ahí comienza mi
calvario, una subida que no se acababa nunca, tras esa subida, un cortafuegos tras ese
cortafuegos, se sigue por el cauce de un barranco que había que hacer malabarismos para
subir, después una subida por un pedregal que ya me estaba matando, y después de eso
seguía subiendo, ahí me jure y perjure que el año que viene no me apuntaría a la media, que
como mucho a la de 12 km, ya veremos que hacemos en el 2020.
Subía andando muy despacio y todo el tiempo que había ganado hasta el primer
avituallamiento lo perdería en esa eterna subida. Por fin llega el final cruzo una valla y a bajar
por otro cortafuegos suuuper empinado que me deja también los muslos muy tiernos, hasta
que ya por fin se llega a un camino donde está el tercer avituallamiento, paro a beber y a
recuperar algo el aliento, desde ahí ya es bajada rápida y agradable pero empiezo a sentir la
llamada de los calambres, esa sensación de que si vas un pelín mas rápido se contraen las
piernas la llevo durante mucho tiempo y para colmo veo el cartel de km 15 y me pierdo, sigo
corriendo y no veo señalización, toca dar la vuelta, no pierdo mucho pero me jodió bastante.
Al final acabo corriendo aguantando para que no me dieran calambres, en la llegada están
Marcos y Sonia que me animan y eso se agradece un montón. Después la correspondiente
cerveza que no puede faltar.
Carrera que me ha resultado dura, el año que viene Dios dirá.
Fdo.Triki.
Club de running, trail running, duatlón, triatlón, ciclismo, natación en aguas abiertas y todo lo relacionado con el deporte, desde la amistad y el buen rollo, porque aunque llegues el último en una prueba, siempre tendrás por detrás a los que no se atrevieron a correrla.
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