Las tortugas ya conocíamos esta carrera, y Aitor y Mónica consideran que tiene un recorrido muy asequible para Iván (os recordamos que es el hermano invidente de Mónica). Se lo plantean, y como este no sabe decir “NO”, pues en Alcañices que nos plantamos para correr. Javi, Yayo, Santi, Ana, Iván, Aitor y Mónica deciden ir el sábado para madrugar lo justo y disfrutar de unas cuantas horas más en buenísima compañía jejeje. Víctor y Nacho van directamente el día de la carrera y al recorrido largo.
Recogemos los dorsales, y aquello ya es una auténtica fiesta, que ilusión encontrarnos de nuevo con nuestros amigos de la La Raya Trail, quienes se desviven con nosotros en particular y con sus corredores y sus gentes en general. Mil gracias chic@s!!
Os paso a contar algunos detalles llamados Ivánadas ya que nos reímos mucho en su compañía.
“Ivánada” 1: Mónica va a buscar a Iván a la habitación para ayudarle con las escalaras del hotel. Iván tiene todo recogido y ya está saliendo por la puerta. En esto que Mónica decide revisar la habitación (ya sabéis, el famoso por si….). Y en este caso bien que hizo, ya que de no ser por eso, Iván se había quedado sin su Apple Watch. Allí estaba, tan ricamente encima de la cama…. Qué suerteeeee!!!
“Ivánada” 2: Aitor le dejó a Iván dos camisetas de tortugas (Una de tirantes y otra sin mangas) para que se las probara y decidiera con cual correr por encima de la térmica. Cuando baja a desayunar se quita la cazadora y… ¿qué pensáis que llevaba puesto? pues sí, las dos camisetas de tortugas a la vez. Está claro que no hubo mucho entendimiento jajajajaja. Este muchacho es todo un crack.
“Ivánada” 3: Estamos desayunando Javi, Aitor, Iván y Mónica. Iván se come su primera tostada. Se pone a untar la segunda con mermelada, y Aitor, después de observarle un rato le dice: “¿qué? ¿Sacando brillo a la tostada?” resulta que la mermelada había caído al planto en vez de al pan, y claro, no esparcía nada, solo pasaba el cuchillo por el pan como si estuviera limando el cuchillo Jajajajaja vaya risas nos echamos.
“Ivánada” 4: Nos estamos preparando para salir. Aitor sujeta la mochila de Iván y se oye: “¿pero dónde vas con esto? ¿Qué llevas? ¿5 litros de agua?” vamos que la mochila pesaba dos quintales, jajajaja Aitor de nuevo le pregunta: ¿pero que llevas dentro? E Iván contesta: “Pues agua y el chubasquero” jajaja, Le pasamos la mochila a Javi y al cogerlo le veo la cara de asombro y unas risas, jajajaja, le llega la mochila a Mónica también y se asusta de lo que pesa, jajaja, menos mal que no va a correr la larga que si no se lleva un bidón de 200 litros, jajajaja. Así que hacemos limpieza e intentamos reducir al mínimo el peso.
Durante la carrera nos surge una nueva anécdota… A pocos metros de la salida Javi le dice a Aitor: “Tío, ¿Dónde vas con las gafas de sol? Pero si el día está negro!” Total que al rato se despeja, un sol de justicia y el único afortunado con gafas de sol es Aitor y Javi va todo el camino con los ojos como si fuese un chino jajaja.
Finalmente pasemos a los agradecimientos (como si de un libro se tratase… jejejeje):
Agradecimiento de Iván 1: “Quiero dar las gracias a la directiva y al club entero de Tortugas Trail León por pensar en mí y ofrecerme correr con su equipación. Sin duda alguna un gran orgullo y una gran sorpresa. Mil gracias. Espero haber dejado el pabellón a un buen nivel jajajaja”
Agradecimiento de Iván 2: “Qué grandísima sorpresa cuando en la entrega de premios, me hacen un reconocimiento, subo al pódium y me hacen entrega de un diploma y una cesta enorme con un mix de productos. Qué subidón. Ya han pasado varios días y aún, solo de recordarlo, se me ponen los pelos de punta. Mil gracias a la organización de la II edición de la Raya Trail, supone muchísimo para mí, y me motiva para seguir trabajando y luchando por superarme y mejorar cada día, afrontando las barreras que aparecen por el camino. Y tremendamente agradecido también con los asistentes en la entrega de premios, por ese eterno y sonoro aplauso que retumbaba en todo el pabellón. Aún me tiemblan las piernas como si lo estuviera escuchando ahora mismo… Especialmente quiero agradecer a Cristina y a Jorge por acercarse a alguien como yo y darme ánimos para seguir peleando cada día.”
Por eso que un día, de repente te levantas de la cama y notas que el mundo se te cae encima, pero los amigos y el deporte te vuelven a dar el ánimo, y entonces piensas… ¡¡vivir es un placer!!
Orgullo tortuguil al 100%
Aitor, Javi, Iván y Mónica
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ResponderEliminarCreo que a la mayoría de los que estábamos allí se nos han puesto los pelos de punta y alguna lágrima ha asomado por las mejillas de más de uno, mientras recibías ese aplauso más que merecido.
ResponderEliminarMucho ánimo, sigue luchando y disfrutando del deporte y de los ángeles que te encuentras por el camino.
No lo dudes, la vida merece la pena.