Para contar esto, tengo que remontarme 15 años atrás, o más...cuando me quité los últimos patines que tuve. Otros tantos años después, animada en especial por Calili y David, me lanzo de nuevo a las ruedas sin acordarme si quiera de tenerme en pie. Un cursillo de una semana para principiantes este verano y enganchada. Parece que me siento un poquito más ágil que corriendo, así que me animo a seguir... y entre tanto me veo "engañada" por Carlos para apuntarme a los 15 de San Sebastián... y aquí estamos.
Para variar...poco entrenamiento y encima a última hora a Carlos le complican la
vida y se cae de la carrera (antes de empezar). Como ya estaba mentalizada y
apuntada, para allí que fuimos el pasado fin de semana David y yo. Era también
una buena excusa para visitar Donosti...
El ambiente era genial. En el mismo día se juntaba La Txacolin, carrera solidaria por El Cáncer de mama, en la que participaba David, marcándose un puestazo nº13!! Poco después saldríamos los patinadores, y pisándonos los talones a los últimos, saldrían los corredores de 15 kilómetros. El nivel se palpaba en el ambiente...Patines que no sabía ni que existían y gente muy, pero que muy pro. Desisto de meterme en ningún grupo que no fuera el de la cola...pues esto tenía pinta de salir quemando rueda. Y así fue.
Salí en el grupo del final. Nerviosa antes de comenzar pues mi nivel estaba muy lejos de todo lo que veía por ahí. Esto de popular tenía poco. Respira profundo Lucía y aprieta los dientes, que toca sufrir. Mi único objetivo...terminar, y que no me eliminaran. Ya en el km 4 se me había complicado la vida. Tuve que parar 2 veces a apretar patines y así perder al último pelotón...El abandonar estaba más presente en mi cabeza que el seguir adelante. Una inyección de fuerza me vino por parte de David, que incondicional, como siempre, me daba unos ánimos gracias a los cuales aguanté otro poco. Me veía incapaz de pillar a los últimos...falta de fuerza y velocidad. Miré para atrás...pero tampoco estaba el coche escoba, así que entre eso y que no sabía dónde estaba, ni cómo volver...decidí darme una tregua y aguantar hasta el kilómetro 10. A partir de ahí, ya solo era terminar. Los últimos estaban más cerca, mi animador personal volvía a no dejarme decaer y así conseguí adelantar a mi objetivo y no ser la última de la lista...
El asfalto...bien a ratos, y otros sin forma humana de rodar. El público...maravilloso. Increíble ambiente e increíble forma de hacerte olvidar el esfuerzo tan grande que vas haciendo. Pocas veces he encontrado a gente animando de esa manera. Así que desde aquí, un abrazo para cada uno de los "AUPAS"...buena gente!
El ambiente era genial. En el mismo día se juntaba La Txacolin, carrera solidaria por El Cáncer de mama, en la que participaba David, marcándose un puestazo nº13!! Poco después saldríamos los patinadores, y pisándonos los talones a los últimos, saldrían los corredores de 15 kilómetros. El nivel se palpaba en el ambiente...Patines que no sabía ni que existían y gente muy, pero que muy pro. Desisto de meterme en ningún grupo que no fuera el de la cola...pues esto tenía pinta de salir quemando rueda. Y así fue.
Salí en el grupo del final. Nerviosa antes de comenzar pues mi nivel estaba muy lejos de todo lo que veía por ahí. Esto de popular tenía poco. Respira profundo Lucía y aprieta los dientes, que toca sufrir. Mi único objetivo...terminar, y que no me eliminaran. Ya en el km 4 se me había complicado la vida. Tuve que parar 2 veces a apretar patines y así perder al último pelotón...El abandonar estaba más presente en mi cabeza que el seguir adelante. Una inyección de fuerza me vino por parte de David, que incondicional, como siempre, me daba unos ánimos gracias a los cuales aguanté otro poco. Me veía incapaz de pillar a los últimos...falta de fuerza y velocidad. Miré para atrás...pero tampoco estaba el coche escoba, así que entre eso y que no sabía dónde estaba, ni cómo volver...decidí darme una tregua y aguantar hasta el kilómetro 10. A partir de ahí, ya solo era terminar. Los últimos estaban más cerca, mi animador personal volvía a no dejarme decaer y así conseguí adelantar a mi objetivo y no ser la última de la lista...
El asfalto...bien a ratos, y otros sin forma humana de rodar. El público...maravilloso. Increíble ambiente e increíble forma de hacerte olvidar el esfuerzo tan grande que vas haciendo. Pocas veces he encontrado a gente animando de esa manera. Así que desde aquí, un abrazo para cada uno de los "AUPAS"...buena gente!
2 Conclusiones:
1- Tal vez ese no era mi sitio.
Pero el año que viene, sí lo será.(Calili, el año que viene a desquitarse)
2- Patinar SÍ cansa!
Hasta la próxima, amigos! Go Tortugas Go
Lucía
No hay comentarios :
Publicar un comentario