Circuito Entreviñas. Carrera de San Román de Hornija.

Circuito Entreviñas, Carrera de San Román de Hornija. 

 

Ya sabía que volvía a entrar en quirófano el lunes, así que para hacerlo con buen sabor de boca, nos apuntamos Mónica y yo a la Carrera Entreviñas en el pueblo de San Román de Hornija. Es un circuito de 5 carreras por pueblos en los que hay grandes bodegas y buenos vinos. 

Daban mucho agua y a mí me gusta correr con mal tiempo pero Mónica encoge si se moja Jajaja así que se inscribió pero sin grandes ganas de correr. 

Al final vamos cuatro en el coche: Xavier, Mª Ángeles, Mónica y yo. De esa manera podemos comentar la carrera, tanto al ir como para venir, y además colaboramos con el medio ambiente. Hemos hecho un grupito en Laguna de Duero para salir y entrenar un poco ya que por aquí no hay ninguna Tortuga más y siempre viene bien correr con más gente. De los Runners Laguna, cuatro en Entreviñas a darlo todo!! 

Llegamos al pueblo y empieza a caer un poco de agua suave… ¡¡oleeeeee Cómo me gusta!! 

Vamos a por el dorsal y vemos que al dar lluvia la gente se ha acobardado o quizás también sea porque se han repartido por todas las carreras que hay este finde, que son muchas. Nos vamos a cambiar al coche y da gusto ponerse la ropa tortuguil incluso lloviendo.  Echo de menos el ambiente de Tortugas con nuestras risas y nervios a la vez, esos ánimos grupales al inicio de carrera, esos gritos de “vamos tortuga” por el camino...  

Como llueve pero no mucho, no sabemos cómo correr: ¿chubasquero? ¿corta vientos? ¿manga larga? ¿visera? ¿gafas? Etc. Uffff cuánto dilema. Aunque luego en carrera estorba todo, así que yo decido salir en tirantes y manguitos… y acerté ya que estuve a gusto porque llovía pero sin ser fuerte, y tampoco hacía mucho frío... 

Al final Mónica y M Ángeles se animan a correr también ¡¡oleeeeee por ellas!! 

Son algo más de 9 km por campos de viñas, eso quiere decir que habría muchos terruños y eso para mí pisada es malo, pero ya no hay vuelta atrás y toca ir más despacio y controlando la pisada. 

Se da la salida y de 200 inscritos solo salimos 57 así que se nos verá bien al llegar a meta jajaja. 

Nada más salir por las calles del pueblo que por cierto, es todo subida, giramos a izquierda y vemos ya a los primeros a lo lejos... o bueno a lo lejísimos por una larga subida hacia la bodega... Vamos muy despacito y mi corazón, piernas y cabeza están cansados hasta el punto que veo a Mónica que en la subida me va pasando pero ni me meneo de mi sitio. Mª Ángeles se queda atrás y Xavier voló como un halcón a las primeras posiciones.

Llegamos al final de la cuesta muy fatigados y voy tirando de cabeza para poder pillar a dos que veo delante de mí. Sigue lloviendo y voy dejando a Mónica un poco atrás, los corredores van esquivando los charcos enormes y yo como buen trailero que me considero me voy metiendo en todos ellos y disfrutando como un niño, aunque con cuidado ya que dentro hay muchas piedras que no se ven por el color chocolate. Voy sufriendo por falta de entreno pero toca acabarla. Aprieto un poco y me meto en un grupo donde está Mario del Comercial Ulsa (ya hemos coincidido en otras carreras con él). Me quedo a su lado un rato, me acomodo, pero quiero más (y por cierto me acuerdo de lo que siempre la digo a Mónica: “vamos, vamos, no te acomodes” jajajaja), así que decido dejarle y pasarle. Todo muy bien hasta que por la lluvia el dorsal, que está empapado, se cae de mi porta-dorsal. Puffff, me paro a recogerlo y me pasan unos cuantos corredores. Cuando quiero volver a ponerlo en marcha, se me caen de las manos los anclajes del dorsal, ¡¡joeeee!! ¡¡Que manos de mantequilla!!  

Otra vez paro a buscarlos y cogerlos entre el barro, en este poco tiempo se me va el grupo. Quedo solo, lloviendo y con el aire en contra, ¿se puede pedir más? Lo paso mal y ya voy mirando para atrás, síntoma de que voy fulminado, no veo ni a Mónica ni a Mª Ángeles pero si a un corredor bastante cerca de mí, así que pongo velocidad suave y poco a poco voy avanzando. Km 6 y giramos a derecha. Veo a una chica con chubasquero y otro chico que iban en el grupo que se me escapó... o sea que ellos tampoco van especialmente bien. Noto las piernas más sueltas y el corazón más relajado así que voy a ver si les doy caza. 

Justo por el km 7'5 empieza una bajada larga y rápida hasta meta, pongo todo de mi parte… voy dando rápidas y largas zancadas, lo que hace que pille a la chica, y la digo que no se quede, que me siga y así hace aunque se va quedando un poco. Cojo al chico que va delante, le pasó y aprieto hasta entrar por las calles del pueblo donde está Xavier haciéndonos fotos, ya que él hace rato que llegó. Entro sin dejar nada en mi cuerpo y con el dorsal en la mano con un tiempo de 49'48. Para mí está bien, aunque muy mejorable. Al poco entra Mª Ángeles y seguida Mónica, un aplauso para ellas. 

Nos vamos a cambiar y a por el choricito y el vino que nos ofrece el ayuntamiento del pueblo (todo muy bueno por cierto) y a ver las clasificaciones que quedaron así: 

• Mª Ángeles: 1ª en su categoría 

• Mónica: 2ª en su categoría 

• Xavier: 3º en su categoría 

• Y yo: 11º en mi categoría 

  

Soy un lastre, pero tengo que aceptar la realidad, Dios me regaló un cuerpo para el pecado pero no para las carreras jajajaja. 

Mª Ángeles (nuestra compañera de Runners Laguna) sube al pódium como primera y con un buen regalo de dos botellas de vino ¡¡Enhorabuena!! 

Me da a mí que el circuito de Entreviñas será para ...... ya lo descubriremos en la última carrera, estad atentos!! 

Volvemos a casa relatando nuestra experiencia en la carrera y con ganas de más. 

Yo con buen sabor de boca y sabiendo que estaré otra temporada en dique seco. 

Volveré con más ganas y más fuerte!! J 

Siempre Tortuga!! 

 

GO TORTUGAS GO!! 

Aitor