Final de Etapa de la Vuelta cilista España en la Provincia

Extraemos del blog  http://www.puertos-en-bici.com/2014/04/alto-de-la-camperona.html un interesantísimo articulo del que seráuno de los finales de etapa más duros de los últimos años en la Vuelta Ciclista España, y que a buen seguro, se unirá a la lista de míticos puertos "cortos pero insufribles" tipo la cuña de las cabres o el mirador del Ezaro

Nos situamos en la comarca de la Montaña de Riaño, provincia de León, para ascender las espeluznantes rampas del Alto de La Camperona. Iniciamos el puerto en el puente sobre el Río Esla, dentro del municipio de Sabero. Transitamos por la CL-626 hasta Sotillos de Sabero, aquí giro a la derecha y comienzo de la parte más complicada, sólo recomendada para los más osados. Puerto final de etapa en la Vuelta a España 2014.

Altimetría: Cuando en el perfil de un puerto nos encontramos con 2 kilómetros al 16 % de pendiente media, y varios tramos superando el 20 %, poco tenemos que comentar. Conocido en el argot ciclista como el "hijo del Angliru", honra a su padre con unas demoledoras rampas que a buen seguro serán de su agrado. El Alto de La Camperona está catalogado como un puerto de Categoría Especial.

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Puente sobre Río Esla, Sabero

Comenzamos el puerto sobre el Río Esla, dentro del municipio de Sabero. Con unos 1300 habitantes (2013), posee un pasado relativamente reciente, ligado a la minería del carbón. Tras el cierre de la última mina en la última década del S.XX, se construyó un museo para rememorar los tiempos en los que esta actividad era su motor económico.

Curva de herradura

Los 7 primeros kilómetros, hasta Sotillos de Sabero, nos sirven para irnos mentalizando de lo que nos espera. Llegados a este punto nos topamos con una carretera estrecha y de pendientes desproporcionadas. Tras unos metros, dejamos a la derecha un cementerio, quien sabe si situado allí para advertir a algún incauto ciclista, de los peligros a los que se expone. A medida que las rampas de hacen más duras, los robles que nos escoltan van menguando en tamaño, privándonos de la tan necesaria sombra.

Cima Alto de La Camperona

Rectas interminables, terreno adusto y pedregoso, carretera rugosa, corazón desbocado y curvas de herradura imposibles, nos acompañan en este último tramo, donde el tiempo parece detenerse. Al fin divisamos las antenas, con un regocijo similar al de Colón al avistar tierra, y nos percatamos de las magníficas vistas panorámicas de 360º, con que nos obsequia este Alto de La Camperona.