El domingo día 10 de octubre volvió una de las carreras que, sin ser una clásica,
ha ido haciéndose hueco en el calendario de carreras de Madrid por dos
poderosas razones; la primera es la distancia, 15 Km, la única en su “especie”;
y la segunda el recorrido, ya que atraviesa lugares tan emblemáticos como la
Puerta del Sol y el Palacio Real, donde nos esperan un montón de chinos y
japoneses turisteando y solemos ser objetivos de sus flashes.
Este
año y debido a las obras (malditas obras), hubo cambios bastante significativos
en el recorrido y concretamente no pudimos disfrutar de esos dos lugares, pero
sigue siendo una buena carrera para aquellos a los que los 10k se les quedan un
pelín cortos.
Otro
de los cambios fue la hora de salida, 8:00 de la mañana y en tandas, para
evitar aglomeraciones. Supuestamente yo estaba en la tercera tanda y entre una
y otra había 5 minutos, pero no fue así, y los corredores salieron cada dos
minutos, por lo que me tocó correr y saltar vallas para poder salir a tiempo con
mi tanda, dejando al pobre Marcos con la palabra en la boca.
Salir
tan acelerado tiene sus contras (que no pude hacer foto de salida) y sus pros,
como que te olvidas de todo lo que los nervios conllevan (como buscar
desesperadamente un baño). Pero claro, me tuve que componer ya en carrera, que
si auriculares, que si móvil, que si se me desatan los cordones………un sinvivir.
Las
sensaciones fueron muy buenas a pesar de haber corrido bastante poco en asfalto.
De hecho, me sentí mucho mejor que la anterior vez que la había hecho, hace un
par de años. Es una carrera muy favorable, casi toda cuesta abajo, pero con
unos cuantos repechos que como vayas muy a saco los subes a trancas y barrancas.
Los
primeros 10km no sentí prácticamente cansancio, después las piernas empezaron a
acordarse de que el día anterior había hecho un express a Peñalara desde el
Puerto de Cotos ya que estaba esperando ver pasar a Marcos con el GTP, y aunque
el susto quedó en nada sí que sentí un pinchacito en el cuádriceps en un
momento determinado que me hizo temblar.
Aproveché
a sacar unas fotillas muy bonitas de la “capi” para compensar la falta de foto
de salida. Parecía una turista y la camiseta con bandera y escudo de León
ayudaba a ello. Me imaginé a mas de uno pensar ¡mira esta modorra! No sabe si viene a correr o a posturear
jajajaja
Pasados
los 10km el cansancio empezaba ya a aparecer, parece mentira que diga esto
justo detrás de la crónica de Marcos…..pero cada uno con lo suyo ¿no? Por otro
lado pensar que por fin yo iba a ser la esperada en meta en vez de al contrario
me dio alitas tortuguiles y entre bufidos y zancadas, localicé a Marcos tras la
valla gritándome y grabándome y empujada por sus ánimos entré con la mejor de
mis sonrisas a meta.
Por
supuesto había que buscar un premio adecuado al lugar y al puente del Pilar, y
nos fuimos a degustar nuestros tan típicos bocadillos de calamares. Go Tortugas gooooooooooooo!!!!
Sonia
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