La carrera era un circuito de dos kilómetros alrededor del pueblo, los senior darían 4 vueltas para completar los ocho kilómetros...pero los veteranos solo dos vueltas para realizar cuatro kilómetros.
Carrera gratuita totalmente, muy buen ambiente festivo, veo una gran cantidad de niños, ideal para iniciar a los más pequeños y les vaya entrando el gusanillo, disfruto un montón viendo lo bien que se lo pasan, sus nervios e impaciencia, y como tras la salida dan el máximo de si mismos.
La carrera con un día muy caluroso y al ser pocos kilómetros, muy intensos, una buena sudada, y es que con los años cada vez me cuesta más las distancias cortas, no me pongo a ritmo hasta pasado un buen puñado de kilómetros. Me encantaron detalles como que la apertura de carrera sea una Vespino (de cuando yo era juvenil) con la bandera de España, o la salida una línea pintada en tiza en la calle, sin chip, etc...detalles atípicos, pero que le dan singularidad a la prueba.
Un 10 a la organización e implicación de todo el pueblo, volcándose en la carrera y haciendo que sea un día perfecto para disfrutar corriendo por las calles de Sahelices. Un esfuerzo que se agradece (al ser todo gratuito), en un mundillo que cada vez tiene más de negocio.
Bolsa de corredor con chucherías, camiseta, algún regalo más...agua, sandía y tosta de queso de los Payuelos. Un sorteo de botellas de vino y quesos tras la entrega de trofeos, culminando con una paellada.
Un día que gocé como el que más, espíritu popular al máximo, ideal para disfrutar del alma de pueblín que tanto nos gusta en verano por el Reino. Después del obligado reseteo total que hice, volviendo a dar marcha al cuerpo con la mente puesta en la elección de futuras batallas.
Con mi "Pata de Mulo" y miel bajo el brazo marché encantado de pasar una jornada perfecta por esta orilla del Esla....
¡VIVA LEÓN! ¡VIVA LOS PUEBLOS!
Marcos
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