Las previsiones avisaban de un día caluroso y
soleado, y no fallaron… más de 2000 valientes se disponían a afrontar los más
de 21 kilómetros de tan ilustre ciudad. Las dudas de correr con camiseta
térmica o con mallas largas se iban disipando, y es que los más de 20 grados
presagiaban una jornada de mucho calor.
Entre los 2000 corredores dispuestos a
terminar la carrera, seis tortugas, 6 jabatos dispuestos a darlo todo hasta la
extenuación, con un solo objetivo, llegar a meta:
10:30 Salida
Las liebres se ponen a correr,
cada uno a su ritmo, y ahí nuestras tortugas, Pedrito por delante, como siempre
con los grandes, David intentando que no se le escapara el globo Luque, Víctor
un pelín por detrás suyo, Diego y Edu con el globo de 1:45, Mario un viejo
conocido, y cerrando la representación tortuguil, Carlos, más atrás.
Se pasa por Santo Domingo, Guzmán, San Marcos,
donde los ánimos de las amistades dan alas, se agradecen muchísimo. En la
banda, Carlos, Lauri, Henar, llegamos a San Cayetano, uf, primera cuesta del
día… bueno parece que se va sobrellevando, y vuelta para León. En el Auditorio
vuelven los ánimos de los amigos, las cosas parece que no cambian, las cosas en
su sitio y con las tortugas sin inmutarse, duras como piedras.
Km 10 la Catedral
Hasta este punto todos a
ritmo enorme, poco parece presagiar lo que a partir de la segunda mitad de
carrera va a ocurrir. El hombre del mazo, o como dice Perico “Monsieur le
Masso” comienza a sacar su arma de paseo.
Nuestras tortugas comienzan el sufrimiento,
David se encuentra con su muro a partir del km 11, Pedro tres cuartos de lo
mismo, parece que ambos han salido por encima de sus posibilidades. Víctor, y
Edu también sucumben, mientras que Dieguín parece que se va encontrando bien, y
va esquivando los mazazos. Carlos cerrando por detrás parece que se lo va
tomando con más calma.
El calvario se hace interminable, y ni el agua
ni los ánimos de Santi, Ana, Jaime, Mar y Carlitos hacen que este mejore en
gran medida. A pesar del gran ambiente, ya solo queda la voluntad de terminar
lo más dignamente la carrera. Asumiendo que las marcas habrá que dejarlas para
otra ocasión.
Poquito a poquito, tanto como las fuerzas nos
permiten, nos vamos acercando a meta en el Estadio Hispánico, en un ambiente
apoteósico donde nos espera la satisfacción de que el sufrimiento haya merecido
la pena por terminar la prueba.
Meta
Pedrito consigue llegar en 1:30’ en una
segunda mitad de carrera de mucho sufrimiento.
David en 1:33’ decepcionado ya que aspiraba a
bajar de 1:30’
Víctor en 1:38’ habiendo sufrido como nunca
desde hacía tiempo
Diego impresionante 1:44’ cuando aspiraba a
hacer 1:50’ la tortuga más satisfecha
Edu 1:53’ una pena esa segunda mitad de
carrera
Carlos 2:28’ cerrando la participación tortuguil
Mención especial al meritorio cuarto puesto de
Sergio Rapado 1:12’ compañero y amigo de muchas tortugas
Y por supuesto a Enrique Fernández Pinedo
ganador de la prueba con absoluta superioridad desde los primeros compases en
menos de 1:08’
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