TRAIL ENTRENO A LA RIOJANA

TRAIL ENTRENO  A LA RIOJANA

Tras ver el pedazo de día que amaneció, no lo dudé un segundo. Me calcé mis nuevas zapas de trail y me decidí a estrenarlas. Como de costumbre, mi lugar de entreno suele ser por los alrededores de mi bonito pueblo, Arnedo, en La Rioja. A un minuto de mi casa ya puedo comenzar adentrarme en la naturaleza, y eso me encanta!

Empiezo en “La Via Verde”, un paseo que va desde Calahorra hasta Arnedillo (un lugar impresionante, no podéis dejar de ver si os acercáis a esta zona), en su paso por Arnedo lo hace en el Parque del Cidacos (el río que cruza).

Entre árboles y puentes recorro unos  3,5 km hasta llegar al Monasterio de Vico. Allí hay dos opciones: una es seguir el mismo camino hasta llegar a Herce y otra, atravesar el Monasterio y empezar a “subir”. La primera opción suele ser la elegida cuando quiero hacer tirada en llano, por eso de empezar a aumentar km a mis entrenamientos. Mi segunda alternativa es sin duda la que ya había elegido antes de salir de casa: acercarme al Isasa.

La Peña Isasa está a unos 1460m de altitud. La he subido muchas veces, y aunque haciendo senderismo es “llevadera”, mi reto es conseguir subirla y bajarla corriendo (algún día no muy lejano…jajaja). Así que hoy intentaré subir algo más de mi ruta actual.

Rodeando el monasterio hay unos caminos que ya empiezan a picar, con senderillos entre árboles que son lo que yo llamo: “la Candamia arnedana”. Llego hasta la parte trasera del Monasterio, cruzo una pequeña carretera y…zas! Ya veo mi meta al fondo. Sigo en el camino, que todavía es pista, unos cuantos km más hasta llegar a la fuente de San Marcos. La dejo atrás y llego a la Ermita de San Marcos. Sin duda mi ritmo es lento, voy disfrutando del paisaje, del sol impresionante que ya teníamos ganas de sentir y haciendo alguna foto (tenía la excusa de la crónica, jajaja).

Siguiendo por la pista cuesta arriba, llego hasta un punto en el que hay que volver a decidir: sigo por el camino o cojo un “atajo” atravesando  los matorrales, por un surco que ya está más que recorrido. Mucho más dura la segunda opción, pero…allá voy. Comienzo a subir la “cuestecita” que se me hará interminable. Se nota el calor y mi falta de fuerzas ya. Un avituallamiento con mi “pócima mágica” y a seguir!jaja

Ya arriba vuelvo a salir a la pista, que sigue picando hacia arriba (este monte es corto, pero no te da un respiro,joun…) y llego al cortafuegos. Es la parte de la subida que más miedo nos da siempre, pues se ve a simple vista desde el pueblo, pero una vez allí parece un poco más de lo mismo. Tras pasarlo miro mis km recorridos: 7. Yo creo que por hoy es suficiente, veremos ahora que tal van estas zapatillas nuevas para la bajada…jaja

Me hidrato y empiezo a descender. Parece que mis fuerzas no están del todo acabadas y voy a poder seguir disfrutando. Noto que mis piernas van solas, tengo magníficas sensaciones y sin duda el entorno y las fantásticas vistas me favorecen. No hay fotos de la bajada, pues como ya digo me encontré genial y lo pasé tan bien que para cuando me di cuenta, ya estaba de nuevo en el Monasterio de Vico.

La mañana de entreno terminó con una cervecita fresquita en la “Calle de los Bares” de Arnedo, con mi satisfacción por haber subido un peldaño más en esa meta que pronto alcanzaré, bajo ese sol que me había acompañado algo antes monte arriba.